La una de la mañana del último domingo antes del gran día, cada vez queda menos tiempo para enfrentarme al jurado que decidirá si mi rutina  merece la pena... Me paso la noche buscando un movimiento que se que existe , su existencia y mi desconocimiento me angustia,... jugamos al escondite, le busco, llevo buscándole desde hace varios meses, se que está detrás de alguna esquina, riéndose en el silencio, esperando que le encuentre.... que bien te escondes!!!!  

     Finalmente, sobre las dos de la mañana, con varios tes en el cuerpo (no me gusta el café) y cansado como una mula, miro hacia atrás y ahí estaba,  tan simple era!!!, tan limpio!!!!, solo tuve que des recorrer mi camino, buscar otra salida de este laberinto en el que me encuentro ya que, aveces, no nos damos cuenta que por donde vamos, no hay puerta... hay ser valiente y darse la vuelta..

     Tendremos una preciosa amistad mi trampa y yo, la puliré y afinaré hasta que sea automática e invisible,  y su belleza resida en su ausencia... su inexistencia...
     
       Mi barquito tiene una nueva vela que me asegura el rumbo....

       

5 comments:

  1. El jurado no es quien decide sino el público...y ya lo ha hecho.

    Aún así, mucha suerte! nunca está de más ganarse la voluntad de la tradición.

    Un besazo

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  2. Es curioso cómo la certeza nos hace fuertes, cómo la convicción nos lleva a caminos rectos y sin baches, cómo la voluntad tira del carro que arrastramos, facilitándonos el camino.

    ¡Qué lindo navegar has propuesto, qué delicia de viaje te espera en tan sólo unos días! Y yo estaré ahí para verlo y para gritarte: "Bon voyage!".

    Un abrazo, men. Nos vemos prontito ;)

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  3. ¡Qué grande eres, Héctor! Mucha suerte para tí y para tu amiga invisible, la trampa.

    Siento no poder verlo, aunque eso me otorgará el privilegio de poder imaginarlo.

    Estaremos soplando para que tu barco llegue a buen puerto.

    Y si te pilla Budapest de paso de aquí a Navidades ya sabes donde puedes hacer una parada.

    Un abrazo,
    Carlos.

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  4. en mi barquito hay sitio para todos¡¡¡¡ gracias familia¡¡¡

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  5. Al final lo conseguiste, men, te llevaste un magnífico galardón. Ahora sólo tienes que disfrutar de tu viaje, porque aún llegarás más lejos.

    Enhorabuena, amigo mío, qué envidia (sana) y qué alegría me da ver todo lo que verás en tu viaje.

    ¡Un abrazo fuerte!

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