A veces hay días que la vida carece de sentido, tampoco digo que lo tenga, pero en ocasiones pierde completamente la razón de ser... se desdibuja como una duna en el desierto... pienso en nuestra existencia vacía que vaga hacia ninguna parte... pienso en el futuro desesperanzado que nos espera... pienso en la mezquindad humana... pienso que no merece la pena pensar...
    Cuando era más joven fantaseaba, antes de dormir, con la idea de hundirme en el mar para huir del mundo terrenal... me lanzaba al agua desde lo alto de un muelle sin mirar atrás, me fundía con la sal para formar parte del océano... hoy hay veces que cierro los ojos para navegar entre las aguas de mi imaginación, para aislarme de mi existencia... pero, tarde o temprano, tengo que volver a abrirlos para continuar caminando por las calles de Madrid, sin encontrar muelles para saltar...