
Por petición de un buen amigo, cuyas tramposas manos están ahí cuando se las necesita, desenpolvo un viejo efecto, un viejo recuerdo en algún lugar de París, una ilusión escondida entre las cartas, un secreto nunca contado....
he aquí lo que suelo contar cuando realizo "secretos contados":
" Todos tenemos secretos… hay secretos que se pueden contar, pero claro ya no serían secretos…. Pero hay otros que no podemos ni debemos contar, esos nos queman por dentro… que hacer con estos?... muy simple id a una montaña, da igual cual, buscad un árbol, y en el hueco del árbol susurrar le el secreto…. Y os podréis ir tranquilos porque los árboles nunca revelan los secretos que les cuentan… imaginaros cuantos secretos puede un árbol oír a lo largo de su vida, millones, y alguna vez os ha contado alguno? No , porque los árboles nunca revelan los secretos que le cuentan… pensad cuantas promesas de amor eterno se han pronunciado bajo las copas de los árboles, entre sus hojas… pero los árboles nunca revelan los secretos que les cuentan , y así podríamos estar años… pero existe un secreto en esta mesa… que pasaría si se lo contáramos a una persona, ella juraría y perjuraría que no iba a contar nada, pero no os fiéis de las personas, por supuesto que a revelaría vuestro secreto, pero no solo este si no todos los secretos que les hubieras contado…
"
"
No comments:
Post a Comment
Note: Only a member of this blog may post a comment.